Tratado elemental de física / por A. Ganot ; traduccion de F.G. Brito.

  • Ganot, A. (Adolphe), 1804-1887.
Date:
1885
Catalogue details

Licence: Public Domain Mark

Credit: Tratado elemental de física / por A. Ganot ; traduccion de F.G. Brito. Source: Wellcome Collection.

    196/1180 (page 188)
    aiiipoUii soldada en la extremidad superior no lieiii' olro oljjdo (¡uo recoger el líquido así expulsado. Después de esta ebullición, el mercurio ha cambiado completamente de aspecto : las burbujas de aire y la iiuniedad que adherían al vidrio han desaparecido, y el tubo presenta el brillo metálico de un espejo bien estañado. En esto se conoce que el barómetro está'bien purgado de gases ; ademas, cuando se inclina suavemente el tubo se oye uii sonido seco y metálico producido por el choque del mercurio contra el vértice : si quedase aire ó humedad en el instrumento, el sonido seria apagado. Una vez enfriado el mercurio, se retira la ampolla, limando al electo el cuello, se acaba de llenar completamente el tubo con mercurio puro y caliente, y luego se le cierra herméticamente con el dedo, como en la experiencia de Torricelli (fig. 469) y se le invierte en la cubeta. El tubo de sifón de Gay-Lüssac se llena de la misma manera ; en seguida se le encorva en su parte capilar, calentándolo con carbones ó con la lámpara de alcohol. 159. Correcciones barométricas. — Sean cuales fueren las precauciones to- madas al construir un baróiiielro, por precisa que sea la medida de la altura ba- rométrica, todas las observaciones están viciadas por dos clases de errores, inhe- rentes á la naturaleza misma del instrumento; unos son debidos á la capilaridad y otros á las variaciones de temperatura. Sea la suma de los primeros y E( la de los segundos; sea h la medida barométrica inicial y II la medida corregida : se tendrá evidentemente 11 Fi- i NI. Vamos á determinar sucesivamente lif y Ej 1.° Corrección relativa á la capilaridart. — En lus tubo; barométricos, cuyo diámetro es ordinarianicnie inferior á 2ü ó 30 milímetros, la columna mercurial, que no moja el vidrio, experimenta necesariamente una depresión capilar. En los barómetros de cubeta la altura observada es, pues, más pequeña que la altura verda- dera ; se cómele un error por defeclo y la corrección E,; es una cantidad positiva. Para valorarla, es preciso conocer al mismo tiempo el diámetro del tubo y la /lecha del menisco, es decir, la altura od dig. 181) de la iuperlicie convexa del mercurio sobre la sección horizontal ah que sirve de base al menisco ; se ha visto, en efecto, (|ue la depresión depende de estos dus elementos. Ahora bien, en un mismo tubo, la longitud de la Hecha no es constante, sino que varia según que el nicniíco se haya formado durante un movimiento ascendente ó durante un movimiento des- cendente. Se la mide haciendo colocarse sucesivamente el borde superior de la co^ redera al nivel ile la base y del vértice del menisco. Leyendo en la escala el des- plazamiento de la corredera, se tiene la altura de la flecha. Conocida esta, asi como el diámetro interior del tubo, no hay más que buscar el valor de la depresión en las tablas de doble entrada calculadas según las fórmulas de l.aplacc. El cuadro siguicnlo sacado de los trabajos de M. Delcros puede servir de modelo de las mismas.