Memoria del Ministerio de Relaciones Interiores y Esteriores de la República Mexicana : leida en la Cámara de Diputados el 10, y en la de Senadores el 12 de enero de 1827.

  • Mexico. Secretaría de Relaciones Exteriores.
Date:
1827
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Credit: Memoria del Ministerio de Relaciones Interiores y Esteriores de la República Mexicana : leida en la Cámara de Diputados el 10, y en la de Senadores el 12 de enero de 1827. Source: Wellcome Collection.

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    luida de todos los elementos de vitalidad social y casi para descender á la tumlia, parece que se recrea y vivifica coa la ilusión de su dominación antigua y con la ostinacion de mantener sus pretensiones 4 ella. En su miseraHe estado de degradación ha hecho esfuerzos para llevar á, efecto sus armamentos sobre la Isla de Cuba, unas veces otorgando pri- vilegios para la libre introducion en la Península de efectos de algodón y granos de Levante, y otras interesando la en- vidia del comercio de Cádiz por restablecer sus comunicacio- nes con las ya perdidas é irrecuperables Américas. Así pu- do organizar una escuadra que hizo salir de la Habana y aparecer en las costas de Colombia. Los designios de esta espedicion, por mas que se hubiesen querido envolver en los velos del misterio, no han dejado de entreverse, y fundada- mente se ha opinado que se proponía sacar algún partido de las defecciones esperimentadas en aquella República, y que intentaba también recorrer las costas de México; pero afor- tunadamente de los siete buques que componían esta escua- dra volviü la mayor parte á entrar en la Habana comple- tamente desarbolada y con notables averías en los cascos, pre- diendo así la España la superioridad marítima á que tan cos- tosamente habia aspirado en los mares de América para emba- razar cualquiera agresión contra Cuba, y emprender tenla- tivas que desconcertasen los nuevos Estados en que pretendo recobrar los derechos de conquista. Cuando sucesos igualmente desgraciados la han hecho en algún intervalo volver en sí misma y reconocer 4 lo que la obligan tanto su lamentable situación, como el convenci- miento de la justicia, se ha complacido en considerar que de su voluntad depende el reconocimiento de nuestra independen- cia, y que por este bien podría obtener alguna recompensa o indemnización pecuniaria. La esperanza en su delirio en- cuentra siempre placer en las mas absurdas ilusiones; y no sería nuevo que á pesar del reciente desastre de su escua- dra, á pesar de todas las miserias y desorganización que la aquejan, 4 pesar de las escenas trágicas y movimientos revolu-